No quería hacerlo, de verdad que no.
No era el lugar ni el momento, pero abrí mi corazón ante ti sin quererlo.
Fue un momento de verdades incomodas, para ti y para mi.
Me saque el corazón y lo deje encima de la mesa, aun latiendo.
Y tu miraste para otro lado disimulando como si nada hubiera pasado.
Yo decidí hacer lo mismo, y ahora estamos de nuevo en el mismo punto del que salimos.
Solo hay una diferencia. Yo ya no tengo corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario